El envenenamiento de los constructores de las pirámides
La construcción de las pirámides de Egipto sigue siendo uno de los mayores misterios de la humanidad. Sin embargo, los especialistas han realizado un hallazgo por demás inesperado: los trabajadores y la población en general en los años en que fueron erigidos estos grandes monumentos, probablemente sufrieron de envenenamiento por altos niveles de metales.
Niveles altos de cobre
En 2019, geoquímicos franceses utilizaron espectrometría sin plasma para medir los niveles de cobre y otros metales en las muestras en el suelo del puerto de Khufu. Los niveles de cobre encontrados eran de 5 a 6 veces más altos de lo normal. Los investigadores determinaron que la contaminación por cobre comenzó alrededor del 3265 a.C., alcanzó su punto máximo 750 años después, y se redujo alrededor del 1000 a.C.
Consecuencias del envenenamiento
Los expertos creen que semejantes niveles de cobre, así como lo presencia de arsénico, se debieron a una próspera industria de fabricación de herramientas para la construcción de las pirámides. La contaminación era tan alta que es posible que la gente más expuesta, como los trabajadores de la construcción, sufriera de vómitos, diarrea y daño a órganos vitales. Los investigadores no saben cómo lidió Egipto con este problema, pero sí saben que la construcción de las pirámides no se detuvo.